Podemos busca romper el PSOE con su moción

09 / 05 / 2017 Antonio Rodríguez
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Iglesias prosigue su ofensiva contra los socialistas con una manifestación en la víspera de sus primarias.

Unidos Podemos busca apoyos entre los distintos partidos para presentar una moción de censura contra Mariano Rajoy

El anuncio de que Podemos buscaría apoyos para una moción de censura en contra de Rajoy provocó más nerviosismo antes que después de la rueda de prensa en la que Pablo Iglesias hizo el anuncio oficial. En poco menos de una hora, el secretario general de Podemos obtuvo la negativa del PSOE –que el presidente de su  gestora, Javier Fernández, corroboró esta semana con una carta nada diplomática– y también de Ciudadanos. Tampoco tardó en llegar el no de PDeCAT o del PNV, que en ese momento ultimaba ya su acuerdo presupuestario con el Gobierno. Distinta, sin embargo, había sido la situación en La Moncloa, donde el nerviosismo que provocó el saber que Iglesias iba a promover una moción de censura da muestra de que el partido morado aún se mira como un peligro potencial desde los aledaños del Ejecutivo. Antes de que Iglesias compareciera en  rueda de prensa en el Congreso rodeado de los portavoces de Podemos y las confluencias, en La Moncloa se vivieron momentos de estrés ante la posibilidad de que la moción pudiera recavar apoyos. Pronto se vio que no sería el caso.

Bildu, como ERC

Iglesias abrió esta semana con EH Bildu su ronda de reuniones con formaciones políticas para presentar la citada moción de censura... para la que aún no hay fecha ni candidato a suceder a Rajoy. El encuentro con los abertzales careció de fanfarria mediática y a su término, la coalición vasca siguió los pasos de ERC y avisó a Podemos que solo apoyará su moción si esta va acompañada de un programa alternativo que “respete los derechos políticos y sociales de la ciudadanía vasca”. Así que la formación morada no cuenta aún con ningún respaldo firme más allá del que le brindan sus propias confluencias.

Con el paso de los días, la moción de censura ha quedado eclipsada por el rifirrafe de gestos y provocaciones entre Podemos y un PSOE que se encuentra en pleno proceso de recogida de avales para sus primarias del 21 de mayo. Precisamente, el partido de Iglesias ha convocado una manifestación para el día 20 por las calles de Madrid, con la que muchos de los dirigentes socialistas ven un claro intento de dividir e influir entre los militantes del PSOE. Además, una moción de estas características por parte de Podemos (la Constitución solo exige que la presenten 35 diputados e Iglesias cuenta con 69) obligaría a retratarse a cada uno de los 75 diputados del PSOE. Desde la gestora presidida por Fernández se insiste en la negativa a apoyar los derroteros de Podemos, aunque fuentes socialistas consultadas por TIEMPO creen que, de llevarse a cabo la votación, el sentido del voto de los socialistas iría hacia la abstención. Con ello no auparían a Iglesias ni tampoco sostendrían a Rajoy.

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