Así actúan los hackers que roban fotos íntimas de las famosas

30 / 09 / 2014 Fernando Rueda
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Los piratas del siglo XXI violan ordenadores y dispositivos móviles de celebridades para entrar en su intimidad. Unas veces hay dinero de por medio, otras se trata solo de voyeurismo. Ha pasado en Estados Unidos y podría estar pasando en España.

En España todavía no se han descubierto casos con famosos, pero en países como Estados Unidos, sí. Grupos de expertos informáticos que habitualmente dedican sus energías a robar claves secretas de ordenadores, información bancaria o datos sensibles de multinacionales, invierten parte de su tiempo en buscar cómo conseguir información particular y fotos de personajes famosos. Después, la intercambian dentro de grupos de amigos o con gente que conocen en la Red. En ocasiones el objetivo es chantajear a las víctimas, pero en bastantes casos lo hacen simplemente por el deseo de ver a sus ídolos en posturas comprometidas o desnudos. En este mundo, más que por dinero, las imágenes se cambian por otras imágenes.

Es una nueva tribu a sumar a las que campan a sus anchas en Internet y que ha tenido recientemente un protagonismo preocupante a raíz de la aparición de decenas de imágenes de celebrities de Estados Unidos, que se habían tomado ellas mismas o sus parejas en la intimidad y en las que aparecían desnudas.

Los expertos en seguridad informática consultados por Tiempo aseguran que esta nueva tribu, que con toda seguridad existe ya en España, no tiene por qué tener un objetivo monetario. “Es como la pornografía de menores –dice uno de ellos–, que se intercambia entre consumidores, foto a cambio de foto”.

Peligrosos smartphones.

Félix Iturbide, experto en la materia, lo lleva avisando desde hace mucho tiempo: “Todos estamos igual de expuestos. El smartphone se está popularizando y la gente guarda en él la agenda, fotos y vídeos personales... Lo que sí es cierto es que la gente con cargos de responsabilidad en multinacionales o personajes conocidos, como actores o deportistas, son quienes corren más riesgos por el rédito que se puede obtener de la información extraída de sus dispositivos”.

Estos hackers aplican las mismas técnicas para robar información económica y para conseguir imágenes privadas, aunque los expertos coinciden en señalar que es más fácil violar la privacidad de las personas que la de las empresas. Mujeres famosas como Jennifer Lawrence, Kim Kardashian, Selena Gómez o Avril Lavigne se hicieron fotos semidesnudas con sus móviles y las guardaron en el teléfono, en el ordenador o en otros dispositivos móviles. Algunas, no todas, guardaron también una copia de esas fotos en sus cuentas personales de Icloud, la plataforma en la nube de Apple.

Inicialmente las acusaciones de no haber blindado bien la puerta de acceso se las llevó Icloud, hasta que las primeras investigaciones demostraron que bastantes de las fotos difundidas ilegalmente no estaban ya o no habían estado nunca alojadas allí. Caso por caso se fue acumulando información sobre el robo de imágenes y las conclusiones fueron bastante deprimentes. La hipótesis actual es que las sustracciones fueron llevadas a cabo por diversos hackers durante varios años, y que en la mayor parte de los casos se trató de simples robos de contraseña que les permitieron acceder a toda la información guardada en los distintos dispositivos. Las famosas utilizaban contraseñas fáciles de descubrir. Además, para recuperar claves elegían preguntas con respuestas tan simples como el nombre de sus abuelos, que había aparecido en varias entrevistas concedidas a los medios durante su carrera. Para colmo –algo demasiado habitual–, utilizaban la misma clave para todos sus dispositivos, por lo que una vez que el intruso había entrado en su ordenador, tenía el camino allanado para birlar la agenda de teléfonos y las fotos guardadas en el móvil.

Filtración involuntaria.

La investigación de estos casos ha señalado la existencia de grupos de personas que trafican por propio placer o por dinero con estas imágenes subidas de tono. Se han conocido en determinados foros en la Red, saben qué material les interesa y disponen de fotos con las que traficar. No pretenden que nadie se entere de lo que hacen, por lo que los investigadores aventuran una filtración no deseada por los propios hackers, que de este modo ven peligrar su seguridad.

¿Existe en España este material? Nadie aventura una respuesta. Muchos pederastas han sido detenidos gracias a que la Policía Nacional y la Guardia Civil tienen equipos especialmente preparados para detectarlos en la Red, seguirles los pasos y proceder a su detención. Hasta ahora no se ha descubierto en España una red de intercambio de imágenes de famosas similar a la que ha aparecido en Estados Unidos, pero no hay que descartarla.

Es difícil creer que las famosas españolas hayan adoptado las medidas de precaución que aconseja el experto Luis Enrique Corredera en estas páginas, como tampoco lo han hecho Jennifer Lawrence o Avril Lavigne. En España se sigue tomando poco en serio el asunto de la seguridad en la Red, algo que demuestra la falta de concienciación sobre los problemas en Internet.

Tan alto es el número de agresiones que sufren los smartphones en España, que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha decidido hace unas semanas publicar un informe, hasta ese momento interno y de difusión limitada a altos cargos, para evitar este tipo de robos, demasiado generalizados.

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