Jens Stoltenberg

Las tropas de la OTAN no entran en combate desde hace dos años, pero esto no significa que el mundo sea ahora un lugar más pacífico. El secretario de la OTAN habla sobre el dilema sirio, Donald Trump y la amenaza terrorista.

La OTAN es la alianza militar más poderosa del mundo, ¿cómo ha permitido que la guerra de Siria escalase de nuevo en 2016, en beneficio del presidente Bashar al Assad?

Sabemos que el uso de la violencia militar es un instrumento poderoso, pero también somos conscientes de que no siempre soluciona los problemas. A veces el uso de este instrumento puede empeorar una situación de por sí horrible.

La OTAN actuó en Bosnia-Herze-govina y Libia para acabar con los asesinatos orquestados por el Estado.

En esos casos había un mandato de Naciones Unidas. En el caso de Siria, por desgracia, la ONU está bloqueada: el Consejo de Seguridad no es capaz de ponerse de acuerdo. (...) El uso de la fuerza militar sin un mandato claro de la ONU podría empeorar el conflicto en Siria y desembocar en un conflicto regional mayor.

¿La renuncia a intervenir en el conflicto no envía una señal clara a Vladimir Putin de que se puede permitir hacer lo que sea fuera del ámbito de la OTAN?

El deber principal de la OTAN es proteger a los países aliados y el territorio de la Alianza. (...) Pero, claro, en este caso nos enfrentamos a un dilema.

Desde la victoria de Donald Trump, usted y otros políticos tratan de minimizar las posibles consecuencias para la Alianza. ¿Realmente piensa que un presidente de EEUU y un secretario de Estado cercanos a Rusia compartirán la política actual de la OTAN de rearme en el este de Europa?

Como otros jefes de Gobierno y de Estado europeos, yo hablé con Trump. Dijo que se siente comprometido con la OTAN y la alianza transatlántica. (...) Por eso confío en que EEUU cumpla con sus obligaciones. Respecto a Rusia: también creo que es importante hablar con los rusos. La intimidación, la defensa y el diálogo no son incompatibles.

¿Qué supondrá la mayor amenaza a la seguridad para los países de la Alianza el año que viene: Rusia o el terrorismo internacional?

Son cosas totalmente diferentes. Rusia no supone una amenaza directa para los países de la Alianza, es nuestro vecino y seguirá siéndolo. Por eso nos esforzamos por dialogar y reducir las tensiones. El Estado Islámico (EI) es completamente diferente. Es responsable de numerosos ataques terroristas en capitales de países de la OTAN. (...) En 2017 tendremos que seguir viviendo con la amenaza terrorista. Pero nuestro objetivo es derrotar y destruir al EI.