La banca castiga a los clientes no vinculados
02 / 12 / 2016 José María Vals
El precio por mantener una cuenta sin otras vinculaciones sigue subiendo en todos los bancos.
La sucursal española del banco holandés ING ha comunicado a sus clientes que reduce la remuneración de la Cuenta Naranja
El mundo de las cuentas corrientes está cambiando a más velocidad de lo que algunos esperaban. Los depositantes siguen apostando por dejar el dinero en las cuentas corrientes ante el creciente riesgo de las inversiones que dan algo de rentabilidad y los bancos endurecen las condiciones para garantizar sus estrechos márgenes. Surgen nuevos productos más baratos de mantener para las entidades al tiempo que los beneficios para clientes se reducen cada vez más al colectivo de quienes tienen contratados varios productos.
Quizás era el último que quedaba por sumarse a la mala racha que sufren los ahorradores particulares, pero al final se ha apuntado también. En las últimas semanas, la sucursal española del banco holandés ING ha comunicado a sus clientes que reduce la remuneración de la Cuenta Naranja, su producto estrella, con el que arañó depósitos hace años al resto de los bancos y que ahora, aunque mantiene unas condiciones algo mejores que las de sus competidores, se acerca ya mucho a la media.
