Estrenos de la semana

Cuando tienes 17 años

Dirección: André Téchiné.

Reparto: Sandrine Kiberlain, Kacey Mottet Klein y Jean Fornerod.

En una localidad del sur de Francia, al pie de los Pirineos, dos adolescentes en plena ebullición hormonal acostumbrados a razonar con los puños deben aprender a entenderse en una insólita convivencia forzada que les empuja a conocer una parte de sí mismos que les aterra. Acoso escolar, conflicto racial e identidad sexual y de género son algunas de las características que hacen original la mirada a la adolescencia de la cineasta francesa Céline Sciamma, directora de Lirios de agua (2007), Tomboy (2011) o Girlhood (2014). En Cuando tienes 17 años pone su escritura sintética, inmediata y evocadora al servicio de André Téchiné, que firma su obra más potente desde Los juncos salvajes (1994).

Hardcore Henry

Dirección: Ilya Naishuller.

Reparto: Sharlto Copley, Haley Bennett y Tim Roth.

En el año 2013 el cineasta ruso Ilya Naishuller se hizo muy popular con su corto Biting Elbows (Bad motherfucker), que exprimía todas las posibilidades de una cámara de alta definición gopro instalada en la frente del personaje protagonista y las aplicaba a una descerebrada huída al estilo James Bond, con grandes peleas, tiroteos, explosiones, saltos imposibles y mujeres en bikini. Era divertido en justa medida y de alguna forma visionario en su uso de la tecnología para la narración de una historia.

Hardcore Henry es exactamente lo mismo, pero mucho más largo. El bueno de Henry, al que su novia científica le ha resucitado de manera milagrosa y ha perdido la capacidad del habla, tiene que enfrentarse a una red criminal internacional que pretende dominar el planeta. O algo así, no tiene mucha importancia, porque todo es una excusa para que veamos todo desde su punto de vista y saltemos, nos disparen y nos golpeen como a él. Es como ver una partida de un videojuego de disparos en primera persona, pero sin pulsar ninguna tecla ni agarrar ningún mando. Una historia que es solo un vehículo que nos lleva del punto A al punto B sin exigir ningún esfuerzo intelectual o físico más allá de una resistencia sobrehumana al mareo.