Experiencia de lujo
Los tratamientos corporales y la gastronomía puntúan al alza en los mejores hoteles.
No hacer nada, el descanso a secas, ya no sirve como reclamo para los huéspedes más exigentes y los hoteles de lujo saben desde hace años que lo que buscan, además de instalaciones y servicio, son experiencias como una excelente oferta gastronómica, la posibilidad de hacer actividades en los alrededores o tratamientos en spa.
Estos factores responden a la pregunta: “¿Dónde te alojarías si no tuvieras que preocuparte por el dinero?”, la cuestión que subyace en la selección de los candidatos a los mejores hoteles de lujo que cada año elige Condé Nast Johansens entre los 2.000 alojamientos reseñados en sus guías en el Reino Unido y los países del Mediterráneo.
Para los expertos que hacen una primera criba, la respuesta es tener la sensación subjetiva de estar en un lugar especial. Este año la tuvieron en seis hoteles españoles, candidatos en distintas categorías. El gato al agua se lo llevó Bohemia Suites & Spa, en Gran Canaria, galardonado como “hotel más romántico”, que ofrece un restaurante y coctelería de autor en un espacio con vistas de 360º a las dunas de Maspalomas.