Reinventarse a los 40

"Tienes un currículum maravilloso, sobradamente preparado. Tu perfil es idóneo. Pero no te vamos a contratar. Eres mayor. Y además eres mujer”. Es la realidad a la que se enfrentan con la crisis los profesionales de más de 40 años con mucha formación y experiencia, y cuyo cénit laboral se ha visto truncado, coincidiendo irónicamente con un periodo en el que están viviendo una segunda juventud. Pero de entre las cenizas de este infierno laboral resurgieron María José Valdivieso, Asun Lisón y José Luis Morato, los fundadores de la asociación Plus40Net. Su objetivo es que los profesionales de entre 45 y 55 años vuelvan a trabajar, a través del emprendimiento o sirviéndoles de trampolín para volver al mercado laboral.

Después de años de experiencia, en aquella época dorada en la que no había que buscar trabajo, sino que las ofertas llegaban solas, Valdivieso –profesional de publicidad– se encontró un buen día sin una rutina laboral que seguir: “La empresa donde trabajaba cerró y me tuve que buscar la vida, porque no sabía ni hacer un currículum, en treinta años nunca me hizo falta. En el Ayuntamiento de Madrid me dijeron rápidamente cuáles eran mis problemas: mi edad, mi experiencia y el hecho de ser mujer. Entonces tuve que quitar la edad del currículum y bajar todas las categorías que había desempeñado”.

Mientras que en el mercado actual a los jóvenes se les pide mucha formación y experiencia, las empresas no son capaces de aprovechar a quienes ya la tienen: “El equilibrio en este país no existe, mientras que en Estados Unidos los profesionales de 50 años están muy valorados y se les contrata por su experiencia, aquí a los mayores de 40 no se les valora y si tienen más de 50, directamente ni se les contrata”, critica Valdivieso.

Adaptarse al mercado.

Después de probar con varios empleos tratando de adaptarse al nuevo mercado y a las necesidades de dominio de las herramientas que proporcionan las nuevas redes y tecnologías, Valdivieso conoció a Morato y a Lisón haciendo un curso de SEO (para mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados de los buscadores). “Nos conocimos reinventándonos –bromea–, y poco después presentamos nuestro proyecto de Plus40Net al Instituto de Empresa”. Sin ser un portal de empleo como tal, pero que poco a poco está dando a luz una ETT propia, dan orientación para el emprendimiento y llevan a cabo acciones de lobbing para “cambiar el cuento”. El local en el que se reúnen ofrece un amplio espacio para que los profesionales alquilen las salas como despachos privados, realicen cursos y formaciones, acciones de networking y puedan desarrollar espacios de coworking. Desde que despegaron hace casi un año, el número de socios se acerca al centenar y han sacado adelante varios proyectos de emprendimiento, entre ellos, el de un grupo de abogados que han creado un proyecto de asesoría legal.

Carmen es un buen exponente del perfil de socio de Plus40Net. Durante años trabajó en diferentes multinacionales del sector informático, hasta que abandonó la empresa en el último ERE. “Entonces pensé que sería una buena oportunidad para poder volcarme sobre mi pasión, el Feng Shui, sobre el que me había estado formando durante muchos años, y ahora trabajo como decoradora”. Una nueva aventura profesional que no habría podido florecer sin la ayuda de diferentes socios especializados en materia jurídica, fiscal y de asesoramiento de emprendedores. El suyo es un claro ejemplo de cómo el apoyo entre profesionales y el espíritu de reinvención puede otorgar una nueva oportunidad para volver al mercado.

Con dos millones y medio de profesionales de más de 45 años en paro, una cifra que va aumentando cada vez más, la gran labor de Plus40Net es la de la motivación. “A nivel de sueldos tenemos completamente asumido que nunca ganaremos lo mismo que hace unos años, y te das con un canto en los dientes si llegas a los 1.000 euros al menos. De mi entorno, más del 60% está desempleado y poco a poco nos quedamos sin prestación, pero tenemos que seguir pagando la casa y la comida. ¿Qué pasa con nosotros? ¿Qué solución nos dan?”, expone Valdivieso. Frente a esa parte de la población que se hunde, en Plus40Net quieren ser optimistas: “Puedes estar muy mal en casa, pero con llorar una semana es suficiente. Luego hay que buscarse la vida y lo que queremos es motivar a todos estos profesionales con emprendimientos y fomentando que se apoyen entre ellos y puedan tener mucha red de networking”. En la organización también hay un equipo de comerciales que trata de establecer vínculos con diferentes empresas para ofrecer las experiencias profesionales de los socios, por ejemplo la empresa Axa.

Hacerse autónomo.

Aunque en un primer momento quienes llegan a la organización lo hacen buscando la salvación, Valdivieso dice que el paso para establecer la ETT propia no tardará en llegar. La reestructuración de empleo en España ha forzado que la gran mayoría de profesionales hayan tenido que hacerse autónomos: “Todos tenemos que crear y nadie nos da nada, pero se contempla que no todo el mundo quiere o tiene ideas para emprender”.

Tampoco son fáciles las ayudas al emprendimiento y trabajar por cuenta propia después de décadas haciéndolo por cuenta ajena puede suponer una rebaja notable en la jubilación. “Después de casi 30 años cotizando un sueldo alto, ahora se paga la mínima cuota de autónomos para poder tener al menos 800 euros de jubilación, ya que lo anterior no se computa”, lamenta. Pero no se cansa de repetir que el fin es volver a trabajar, tanto por la necesidad que supone el mantener a una familia como la realización profesional de cada uno. “Me gustaría reunirme con los responsables de recursos humanos de las grandes empresas para que nos den una explicación de por qué han decidido cargarse a un colectivo que tiene mucha experiencia y puede aportar mucho a las empresas”. Para todos ellos tiene un mensaje: “Existimos”.