Una visita guiada a los "emblemas de la corrupción" en México

16 / 02 / 2017 Jenny Barke (DPA)
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El "Corruptour" es una visita guiada un poco peculiar. Un viejo autobús escolar adaptado, con una parte del techo descubierta, hace un recorrido por los "monumentos de la corrupción" en Ciudad de México.

El autobús del "Corruptour" cuenta con 30 asientos y hace dos recorridos cada domingo

Los creadores de la iniciativa buscan generar conciencia sobre este problema en México visitando sitios que consideran sinónimo de los males del país.

Uno de ellos es un monumento en honor a 43 estudiantes de la escuela de Ayotzinapa que desaparecieron en 2014 después de ser entregados por policías a un grupo criminal. Otro, el edificio del Senado, que tuvo un costo millonario.

Al pasar por la Estela de Luz, una torre espigada en el Paseo de la Reforma, la guía Patricia de Obeso González dice a los pasajeros: "A la derecha, una obra maestra de la arquitectura. Un monumento que nos costó a los contribuyentes 1.300 millones de pesos (63 millones de dólares/60 millones de euros, al cambio actual)".

Los pasajeros echan hacia atrás la cabeza para observar la torre de 100 metros de altura construida para celebrar el bicentenario de la Independencia de México en 2010. 

"En lugar de cuatro nuevos hospitales tenemos sólo unas placas de acero que no ayudan precisamente a la estética urbana", afirma De Obeso. El monumento se hizo a iniciativa del presidente Felipe Calderón (2006-2012) mediante concurso público. "Costó cinco veces más de lo planeado", explica.

De Obeso copió la idea del "Corruptour" de uno similar realizado en Monterrey, 900 kilómetros al norte de Ciudad de México. La respuesta ha sido grande: los 30 asientos del autobús, que hace dos recorridos cada domingo, están agotados hasta el 9 de abril, última fecha prevista en su página de reservas en Internet.

En el índice de percepción de corrupción de Transparencia Internacional México quedó en el lugar 123 de 176 países en 2016. En esa escala, el primer lugar corresponde al país con menos corrupción y el último al más corrupto. 

La posición de México empeoró frente a la anterior medición. Para los mexicanos no es una sorpresa. Un 60 por ciento de los entrevistados en una encuesta difundida en 2015 por el instituto nacional de estadísticas dijo creer o haber escuchado que había corrupción en los trámites que le habían tocado realizar.

Una de las escalas mencionadas en el "Corruptour", aunque no se pasa por ahí porque, según los organizadores, se desviaría la ruta, es la llamada "casa blanca", que fue epicentro de un escándalo de presunto conflicto de intereses en el entorno presidencial.

Se trata de una mansión que la esposa del presidente Enrique Peña Nieto, Angélica Rivera, estaba pagando a un contratista del Estado y de la que se tuvo que desprender a raíz del escándalo.

Cuando los pasajeros se involucran, los guías sienten que han cumplido su cometido. Muchas veces toman el micrófono. 

"La corrupción no es sólo un problema burocrático", dice Andrés Torres, de 25 años. "Cuesta miles de vidas, se nos mueren los pacientes en los hospitales".

Una de las últimas estaciones del "Corruptour" son las instalaciones de la mayor cadena de televisión de México, Televisa. Según De Obeso, forma parte del recorrido para denunciar los nexos oscuros que hay entre la política y los medios de comunicación.

El provocativo "Corruptour", que por ahora sólo estará activo tres meses mientras busca financiamiento para seguir, incluye en total diez lugares señalados como "emblemas" de la corrupción. 

El objetivo es mover a la acción, según su presentación en Internet: "Este es nuestro pequeño grano de arena y a ello queremos invitarlos: a promover que la gente fije posición y se comprometa de manera pública en contra de la corrupción".

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