El sexting aviva las relaciones sexuales

Es uno de los secretos de una buena relación sexual y además, según algunos estudios, ya se ha convertido en la primera práctica entre las parejas. La tecnología se ha colado en nuestras vidas y en nuestros comportamientos eróticos de una manera imparable. ¿Quién no ha intercambiado alguna vez un mensaje subido de tono o una foto sexualmente sugerente con su pareja? Esta afición, que está cada vez más extendida no solo entre jóvenes sino también entre adultos, se está convirtiendo por derecho propio en un elemento más del flirteo.

Según un estudio presentado en una convención de psicología en Toronto, casi el 80% de las parejas han sucumbido alguna vez ante los beneficios del sexo telefónico. Un fenómeno que los americanos, muy dados a los acrónimos, han bautizado como el sexting (abreviatura de sexo y texto o mensaje), y que se ha hecho sumamente popular porque según aseguran los que lo practican ayuda a tener más y mejor sexo. De hecho tres cuartas partes de los consultados asociaban el sexting con una mejor satisfacción en su relación de pareja. Pero además los números cantan: parece que los que se emplean a fondo en enviar fotos o mensajes subiditos de tono tienen siete veces más probabilidades de ser sexualmente más activos. Y hay algunos que no paran: según cifras del mismo estudio, un 30% reconoce que no solo envía fotos o mensajes calientes desde la tranquilidad de su hogar, también la oficina y otros lugares públicos son para estos usuarios un perfecto escenario a la hora de calentar motores. Pero el sexting no solo ocupa un primer lugar en el ranking de las preferencias entre los que inician una relación o entre los que han introducido este juego como un elemento más de su actividad sexual, sino que algunos expertos recomiendan practicarlo porque además resulta un buen antídoto para parejas que han perdido el interés por la relación o que están pasando por un periodo de desinterés sexual y necesitan un elemento extra que avive su pasión. Por si fuera poco, los beneficios del sexting no paran aquí: no solo es bueno para el cuerpo sino también muy saludable para la mente, ya que resulta perfecto para alejar los problemas de ansiedad y de autoestima.

El enemigo en casa. Pero el binomio teléfono y sexo no está exento de riesgos. Este tipo de seducción y erotismo con ayuda de la tecnología no solo ha encandilado a numerosas parejas de todo el mundo que han visto cómo su deseo sexual se ha visto incrementado. Conocidas celebrities han tenido que ver cómo sus selfies subidos de tono acababan siendo públicos tras ser hackeados su terminales telefónicos. Scarlett Johansson envió unas fotografías desnuda al que era su esposo, Ryan Reynolds, sin imaginar que esas imágenes aparecerían después publicadas en la Red. El FBI tuvo que intervenir y arrestó a un hacker que tras acceder al dispositivo de Johansson obtuvo los archivos. Y no es la única famosa que ha visto cómo su afición al sexting le ha puesto en una situación más que incómoda. Rihanna o Jennifer Lawrence también han pasado por el mismo trance.

Pero los peligros de practicar el sexting no son solo externos y, desafortunadamente, a veces el tema puede acabar yéndose de las manos. Los expertos avisan de que no siempre hay que contar con la buena voluntad de la persona que recibe el mensaje, sobre todo en relaciones incipientes en donde no se conoce del todo al destinatario, ya que se corre el riesgo de que sea este el que acabe difundiendo las imágenes. Claro que las parejas estables tampoco están exentas de caer en la misma trampa. Más vale que las cosas no se tuerzan con la pareja porque hay veces que la venganza se sirve fría y cuando la relación se acaba, puede entrar en juego el chantaje o la extorsión.