Bastón y mando

El mundo rico está envejeciendo, y también sus líderes empresariales. Según la firma de contratación de ejecutivos Spencer Stuart, un tercio de los consejos de administración de Estados Unidos prevén que sus miembros no se jubilen hasta los 75 años o incluso más tarde. En 2005 esto solo se daba en un 8% de las compañías. Casi dos de cada cinco consejos de las empresas del índice S&P 500 tienen una media de edad de 64 o más años, frente al 18% de hace una década.

Esto podría hacer que muchos de los actuales líderes aún tuvieran por delante veinte años de carrera. A pesar de toda la atención prestada a los jóvenes revolucionarios de Silicon Valley, los muy viejos seguirán al mando en 2017.

Es tan sencillo como que la edad no es obstáculo para seguir administrando dinero. Warren Buffett, que siempre ha demostrado una enorme visión a largo plazo, cumplirá 87 años en 2017, si todo va bien*; Charlie Munger, vicepresidente de Berkshire Hathaway, una empresa perteneciente al holding de Buffett, cumplirá 93 el primer día del año. T. Boone Pickens, otro multimillonario, soplará 89 velas en mayo; y George Soros hará 87 en el mes de agosto, mientras que Carl Icahn se convertirá en un activista de 81 años.

Pero los mayores no solo siguen fuertes en el sector financiero. Sheldon Adelson, magnate de los casinos, celebrará su 84 cumpleaños en 2017. Rupert Murdoch, empresario de medios, apunta a los 86. Mientras que Li Ka-shing, el hombre más rico de Hong Kong, cumplirá pronto los 89 años.

Es poco probable que al cumplir 85 años Bernie Ecclestone deje de tener un papel preponderante en la Fórmula 1, aunque el control está pasando a dirigentes más jóvenes como John Malone, de 76. Por otro lado, el nuevo presidente estadounidense también será del bando de los pensionistas.

Los inversores tienen sentimientos encontrados sobre esta longevidad. Pocos accionistas de Berkshire Hathaway quieren que Warren Buffett se retire, pero a muchos les preocupa qué ocurrirá cuando ni él ni Charlie Munger estén. Y es que los planes de sucesión están a la orden del día cuando el jefe es un octogenario.

También preocupa que un jefe anciano pueda estar demasiado tiempo en el cargo. La capacidad mental de Sumner Redstone (93 años), por ejemplo, el accionista mayoritario de la empresa de medios Viacom, fue objeto de un testimonio escabroso en un proceso judicial de 2016. Ahora que la edad ya no retira a los jefes como solía hacerlo, en el futuro este tipo de casos serán cada vez más habituales.