Operación Reinicia para Cataluña

Pizarro tuvo sus 13 de la fama, con los que conquistó Perú. El presidente catalán, Carles Puigdemont, cuenta con otros 13 de la fama, aunque en esta ocasión son organizaciones y no guerreros. Son las entidades o plataformas que apoyan la independencia de Cataluña y que plantean que en el año 2017 se consumará la ruptura con España y su irrupción como nuevo Estado “dentro de la UE”. Claro que esta es una visión unilateral, como el referéndum que algunos sectores plantean o la propia declaración de independencia. Pero con su ayuda, Puigdemont podría dejar a Cataluña “a las puertas de la independencia”, tal y como ha prometido ya varias veces.El manto que agrupa a estas 13 plataformas de la fama es un denominado “Proyecto Reinicia”, que pretende reunir todas las iniciativas y sensibilidades que confluyen en el proceso constituyente de la república catalana y en la nueva Constitución de Cataluña, al margen de partidos políticos. En la hoja fundacional de este proyecto, figuran la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural, Juristas por la Independencia, Procés Constituent, Súmate, La Consti, Drassanes per la República Catalana, La Marxa Som, Sobirania i Justícia, Grup Promotor per a la Convenció Constitucional, Parlament Ciutadà, El País que Volem y Fundació Llibreria Les Voltes. La hoja de ruta independentista, que se negocia a múltiples bandas, prevé comenzar el próximo mes de septiembre una fase de participación ciudadana para enriquecer un texto constitucional que sustituya a las leyes españolas y plante las bases de una república catalana independiente.Algunas de estas entidades están fuertemente vinculadas a la ANC, que es un manto que acoge colectivos sectoriales para extender su influencia a toda la sociedad. Uno de estos colectivos es Drassanes per la República Catalana, que da cabida a algunos independentistas históricos que en el pasado estuvieron vinculados a formaciones como Moviment de Defensa de la Terra (MDT), la referencia secesionista en los años 80 y parte de los 90. Algunos de sus miembros son los que presionan en el seno de la CUP para que esta organización apoye al Gobierno catalán al menos hasta que se puedan convocar unas “elecciones constituyentes”. Drassanes considera, además que existe un objetivo común entre todos los independentistas: liquidar el Estado de las autonomías. Por ello, apuestan por aparcar, al menos de momento, las diferencias ideológicas entre los partidos secesionistas.

Referéndum

En un documento elaborado este mismo mes de junio, sin embargo, la plataforma alerta de que el procés catalán se hace ingobernable con determinados planteamientos radicales. “La idea de un referéndum unilateral independentista situada fuera del contexto adecuado podría ser (como ya muchos expertos han remarcado) un factor de distorsión o de dilación en el camino hacia la independencia”, dice el texto. Es otro aviso a la CUP, que ha planteado apoyar al presidente catalán, Carles Puigdemont, solo si este se compromete a realizar ese referéndum, idea que ha sido bien acogida tanto por la CUP como por ERC.Una de las premisas que estos colectivos plantean es una hoja de ruta que reclame al Estado español un referéndum “vinculante sobre la independencia de Cataluña” dentro del 2016. Si España no acepta ese referéndum, “el Parlamento declarará unilateralmente la independencia de Cataluña”. Simultáneamente, “y dentro de la legalidad catalana, se aprobará la Ley de Transitoriedad Jurídica y se convocará a la ciudadanía a la celebración de un referéndum de ratificación de la declaración de independencia y del nuevo marco jurídico creado”.