Wim Wenders

04 / 09 / 2017 Esteban Engel [Foto: Joan Cortadellas]
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Cineasta

“Es realmente emocionante hacer algo por primera vez”

Foto: Joan Cortadellas

El cineasta alemán Wim Wenders ha debutado este verano en Berlín como director escénico de la ópera Les pêcheurs de perles (Los pescadores de perlas), de Georges Bizet, de la mano del director de orquesta y pianista argentino-israelí Daniel Barenboim.

P_ Dirige por vez primera una ópera. ¿Cómo se siente al introducirse en un campo nuevo?

R_ Es realmente emocionante hacer algo por primera vez. No es frecuente tener que aprender tantas cosas de una sola vez. En el cine yo tengo todo más o menos bajo control pero en la ópera el director de orquesta es la persona decisiva y el director escénico, el segundo violín. Ahora estamos ensayando con la orquesta y estoy comprobando con satisfacción cuánto se debe preparar la dirección musical.

P_ ¿Qué puede aprender el director de ópera Wim Wender del director de cine Wim Wenders?

R_ La distribución del espacio, la luz. Para mí, la luz es el elemento más importante después de la música. La luz cuenta mucho en el escenario. En la ópera uno cuenta con un único espacio y la luz es la que permite crear nuevos espacios y ambientes. Esta ópera discurre en un lugar que es muy apropiado para la imaginación de cualquiera, en una isla.

P_ En sus películas la música también juega un papel central.

R_ Sí, hay desde música latinoamericana a rock and roll, blues o fado. La música clásica no la incluyo a menudo en mis películas a pesar de que he trabajado a menudo con música de orquesta.

P_ ¿Ha evitado la música clásica?

R_ Yo escucho mucha música clásica, pero la ópera es otra profesión. Pensé en ello por primera vez en el año 2013, cuando me propusieron participar en el festival de ópera de Bayreuth [en Alemania]. Pero de ahí no salió nada y después me llamó Daniel Barenboim.

P_ Entre quienes no son habituales a la ópera se ha creado una especie de mala fama de que se trata de una disciplina un tanto artificial. ¿Comparte usted esta opinión?

R_ Sí, en ocasiones ocurre. En algunas óperas yo también he pasado por eso, no consigo entrar en la obra porque me resulta demasiado artificial. En el caso de Les pêcheurs de perles también tuve un gran miedo a que ocurriera eso pero en cuanto vi a los cantantes, el miedo desapareció. Todo resultó muy real.

P_ Usted quería ser saxofonista.

R_ Sí, a pesar de que este instrumento apenas está presente en la orquesta. Pero cuando tenía 21 o 22 años vendí mi saxofón y me compré una cámara de 16mm. Fue una especie de encrucijada en mi vida, pero no me arrepiento. Para ser realmente bueno no hubiera podido hacer otra cosa que tocar el saxofón. Me di cuenta de que no contaba con el talento necesario.

P_ Y optó por una disciplina artística en la que se entremezclan todas las artes, el cine.

R_ Sí, pero eso lo he ido descubriendo poco a poco. Mis primeras películas eran mudas y el hecho de que el cine tuviese relación con la música, la arquitectura o la literatura lo aprendí más tarde. [DPA]

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