Franck Vignard

Cetelem es una entidad financiera especializada en la concesión de créditos al consumo perteneciente al grupo BNP Paribas. Como parte de su actividad, lleva 20 años elaborando un observatorio sobre los patrones de consumo de los ciudadanos europeos. Su director comercial, Franck Vignard, explica en esta entrevista las principales conclusiones de su última edición.

P_ Acaban de publicar su observatorio de consumo europeo. ¿Cuáles son sus objetivos?

R_ Este año el Observatorio Cetelem celebra su vigésimo aniversario en España. Llevamos analizando el consumo y los hábitos y tendencias del consumidor desde 1997. Como división de crédito al consumo con casi tres décadas de actividad en nuestro país, profundizar en el análisis de ese consumo era algo primordial, no solamente como forma de consolidar nuestro conocimiento del sector, sino como forma de compartir ese conocimiento con nuestros clientes, nuestros socios y con la sociedad en general, ofreciéndolo como uno de los valores añadidos de nuestra empresa.

P_ ¿Cuál es la percepción que tienen los europeos, y en concreto los españoles?

R_ La percepción de los ciudadanos de los países encuestados es mejor que en años anteriores, tanto en la opinión sobre la situación de sus respectivos países, como de la situación personal de los propios consumidores. En 2016 el europeo valoraba a su país en un 4,7 sobre 10, un año después esa media se ha incrementado hasta el 4,9. Y en referencia a su situación personal, hemos pasado de un 5,4 a un 5,5. En el caso concreto de los españoles, el incremento respecto al pasado año es el mismo en ambos casos (0,2 puntos), siendo superior la nota otorgada a la situación personal (5,4) que la dada a la situación del país (4,3).

P_ Una de las señales más evidentes del buen ánimo entre los españoles es que la intención de consumir ha vuelto a los niveles anteriores a 2008. ¿La crisis ya es historia?

R_ La economía española ha crecido un 3,2% en 2016 y seguirá en 2017 como una de las economías de más fuerte crecimiento en Europa. Esto ha permitido incluso un descenso paulatino del paro. Sin embargo, no podemos olvidar que los porcentajes de paro siguen siendo elevados y hay mucho empleo temporal. Así que creo que todavía es pronto para decir que la crisis ya es historia. Lo más importante en mi opinión es que los fundamentos de España son muy sólidos y veo el mercado Español como muy innovador.

P_ ¿Cuáles son las manifestaciones de los europeos y los españoles en cuanto a la intención de aumentar su consumo y/o ahorro?

R_ Las intenciones de consumir más recuperan el nivel de antes de 2008. El 46% de los consumidores europeos encuestados en el Observatorio Cetelem Consumo Europa 2017 declaran una intención de incrementar su gasto (6 puntos más que en 2016), y el 41% desea ahorrar más (1 punto menos que en 2016). España está por encima del promedio europeo con un 47% de declaraciones, en fuerte aumento igualmente sobre 2016 (6 puntos). En cuanto al ahorro, los países que destacan tienen un toque más latino. Portugal e Italia ocupan las dos primeras posiciones (57% y 50%). Pero es en España sobre todo, y en Francia, donde estas intenciones de ahorro crecen con más fuerza (20 y 6 puntos porcentuales, respectivamente).

P_ ¿Cuáles son los aspectos que más preocupan a los consumidores?

R_ Los europeos se muestran moderadamente preocupados sobre su vivienda o las consecuencias del brexit (57% y 63% respectivamente), pero se muestran más pesimistas en lo que concierne a la situación migratoria de su respectivo país (77%), a la salud (75%) y a la capacidad del país para reformarse (75%). En lo que concierne a España, las mayores preocupaciones manifestadas son respecto al medio ambiente, la situación económica del país y el sistema educativo.

P_ ¿Cuál es la opinión respecto al futuro de la situación del país?

R_ Los españoles encuestados destacan por encima de la media europea en ser más optimistas sobre la situación del país en los próximos dos años. El 32% piensa que la situación va a mejorar en los siguientes dos años, frente al 19% de la media europea, siendo, junto a Portugal, uno de los países más optimistas en este sentido. Aunque hay que señalar que el porcentaje de los que piensa que la situación va a empeorar es del 34%, muy por debajo de la media de los 15 países encuestados, que se sitúa en un 45%. 

P_ ¿Cómo puede afectar la falta de confianza al consumo?

R_ La confianza es un factor determinante en la economía en general y el consumo no es una excepción. Si hay incertidumbre, el gasto se retrae. El Observatorio Cetelem Consumo Europa lo había adelantado en ediciones precedentes, el comportamiento de los consumidores europeos ha evolucionado sensiblemente en estos últimos años en un contexto de crisis arraigado. Esta edición 2017, basada en el tema de la confianza, no hace más que confirmarlo. La inquietud expresada por los europeos se traduce en su presupuesto. Si el 59% declara que es ante todo una falta de medios lo que les frena realizar más gastos, el 45% declaran preferir ahorrar para preservarse de un eventual imprevisto. La falta de confianza en el futuro y la evolución de su país son también frenos para el consumo de los europeos.

P_ ¿Se puede afirmar que la confianza en una marca puede suponer un activador de compra?

R_ La confianza en una marca impulsa la compra imprevista del 51% de los europeos. Los españoles parecen mantener algo más su autocontrol (46%). En el lado opuesto, nos encontramos a aquellos consumidores que por falta de confianza en una marca renuncian a realizar una compra (58%). Los portugueses, eslovacos y españoles son los más tajantes (73%, 70% y 68%, respectivamente). Sin embargo, la confianza en una marca no tiene precio. El 67% pagarían más caro un producto de aquella marca que admiran.

La confianza en una marca impulsa la compra imprevista del 51% de los europeos. Foto: Getty

España y Francia son los países de la UE en los que más ha crecido la intención de ahorro. Foto: Viktor Cap