La construcción tira de pasaporte en sus negocios
Salir fuera ha sido el gran secreto de las constructoras españolas para salvar el bache
Varias noticias han hecho salir a la palestra a constructoras españolas durante los últimos días. ACS lidera por cuarto año consecutivo el ranking de empresas de construcción e ingeniería más internacionalizadas del mundo; FCC gana el mayor contrato de su historia, que es en Egipto, y Sacyr vuelve a dar dividendo. Son tres cosas muy distintas pero que muestran cómo este sector, acosado durante los últimos años por la crisis inmobiliaria y el descenso de inversiones en infraestructuras, ha buscado nuevos negocios con los que salir adelante.
De hecho, las seis grandes constructoras españoles (ACS, Ferrovial, Acciona, FCC, OHL y Sacyr) tienen en España, en conjunto, apenas el 21,3% de su negocio, según datos extraídos de las cuentas de las empresas a 30 de junio pasado. La cifra, sin embargo, no es igual para todas y la gran protagonista aquí es ACS, la constructora presidida por Florenti-
no Pérez, que es la que contribuye a reducir el peso del negocio español hasta esos límites.