A por las devoluciones de la renta

Muchos de los contribuyentes que esperan con ansiedad la devolución del IRPF se pueden encontrar con una sorpresa poco agradable, ya que los ayuntamientos han decidido poner cerco al moroso. Si hasta ahora Hacienda cobraba las multas de la Dirección General de Tráfico de las declaraciones negativas de la renta, muchos ayuntamientos y diputaciones (que son las que recaudan por convenio los impuestos de los municipios en vía ejecutiva) han empezado a solicitar también el embargo, total o parcial, de las cantidades a devolver para cobrar las deudas de impuestos municipales a sus ciudadanos. Mientras, las comunidades autónomas, que también gestionan estas deudas en vía ejecutiva, y algunos ayuntamientos, como Madrid y Barcelona, negocian con la Agencia Tributaria un nuevo convenio para cobrar por este sistema también las multas de tráfico en sus municipios. Y el terreno para hacer caja para los municipios no puede ser más abonado, porque 3 de cada 4 declaraciones salen negativas, en total, casi 13 millones de declaraciones por un importe de casi 10.000 millones de euros, ya que las retenciones están calculadas al alza y el contribuyente adelanta ingresos de más.

Convenios.

En 2004 se firmaron los primeros convenios de colaboración e intercambio en la gestión recaudatoria entre ayuntamientos y la Agencia Tributaria, pero en realidad no se han activado hasta este año. Aunque muchos de ellos todavía no han enviado sus listados de morosos porque están desarrollando las aplicaciones informáticas preceptivas, unos 400 ayuntamientos y 25 diputaciones (que engloban a varios miles de municipios) ya se han adherido a este convenio (ver recuadro) que permite “un sistema de embargo de devoluciones mediante un procedimiento de traba de aquellas devoluciones tributarias solicitadas por los contribuyentes que a su vez sean deudores con deudas tributarias en fase de embargo de las entidades locales”. Por tanto, además de la devolución del IRPF también se están cobrando estas deudas a empresarios en las devoluciones de IVA y del Impuesto de Sociedades.

Se trata de las deudas tributarias de los impuestos (de Vehículos, sobre Bienes Inmuebles y plusvalías, entre otros) que los ayuntamientos no han conseguido recaudar en el periodo voluntario de pago y que estos organismos gestionan ahora por la vía de apremio. Es el Código Civil y la Ley General Tributaria quienes determinan el orden de prelación de los embargos en vía ejecutiva y en primer lugar figura el dinero efectivo o en cuentas en entidades de crédito. Y como la devolución de la renta es dinero efectivo, los ayuntamientos están enviando los listados de sus deudores para que Hacienda acate el embargo y compense esa deuda tributaria.

Por este servicio, señalan en Hacienda, “la Agencia no cobra nada, pero sólo embargamos deudas por encima de los 150 euros de principal o acumuladas a partir de esta cantidad, tal como estipula el convenio”. Pero no hay que olvidar que además del principal de la deuda, el fisco cobra el recargo preceptivo del apremio del ayuntamiento y los intereses de demora, que equivalen a un 30% más de la deuda. El embargo se aplica sobre la deuda más antigua si se tienen varias, y si no cubre la totalidad, se traba la devolución hasta donde llegue de forma parcial.

Recaudación.

Pioneros de este sistema han sido las diputaciones de Alicante (que engloba a los 160 municipios de la provincia) y de Barcelona desde 2004, aunque los importes embargados son mínimos y la mayor parte se ha realizado sobre IVA. El Ayuntamiento de Zaragoza consiguió recaudar en el segundo semestre de 2005 por este sistema unos 690.000 euros de 1.257 expedientes de morosos, aunque la mayoría de estos embargos también procedía del IVA y del Impuesto de Sociedades.

Pero ha sido este año cuando Hacienda ha comenzado realmente a descontar y a cobrar las deudas de los ayuntamientos de las devoluciones de la declaración de la renta. Algunos contribuyentes que han solicitado la devolución ya han recibido una comunicación de la Agencia Tributaria informándoles de la Retención por compensación de deuda tributaria. Por ejemplo, según fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza, que reconocen una deuda de 45 millones de euros, en lo que llevamos de año han enviado a Hacienda 2.111 expedientes de apremio por un importe de 950.000 euros.

Listados.

Los ayuntamientos más importantes de España como Barcelona y Madrid han comenzado también este año estas actuaciones de cerco al moroso vía IRPF. El de Barcelona lleva recaudado hasta junio por este sistema 830.800 euros de 1.864 expedientes. Y el de Madrid, que acumula un total de 426.599 expedientes de apremio por un importe de 263 millones de euros, ha enviado hace un mes una primera remesa de solicitudes de embargos con un listado de 50.000 deudores, que es el límite mensual que se puede enviar a Hacienda. A finales de junio ha enviado una segunda lista con otros 50.000. La primera remesa pretende el embargo de las declaraciones negativas de madrileños morosos por un importe de 105,8 millones y la segunda del entorno a otros 100 millones. Según Rosana Navarro, directora general de Tributos del Ayuntamiento de Madrid, “hemos enviado ahora los expedientes de los morosos de mayor cuantía y los que arrastraban deudas antiguas no prescritas”.

Pero si los ayuntamientos no pueden o no quieren ejecutar las deudas en esta vía de apremio pueden encomendárselo a la Agencia Tributaria, que empezará a cobrar también de las devoluciones del IRPF, IVA e Impuesto de Sociedades para continuar después con cuentas corrientes, créditos, valores, sueldos y hasta bienes inmuebles.

Convenios.

Una docena de ayuntamientos y diputaciones han suscrito ya un convenio de recaudación ejecutiva con Hacienda. La Agencia se encarga de todo como si de una deuda propia se tratara, desde notificar el apremio hasta resolver los recursos interpuestos o ejecutar las garantías. Por este servicio cobra entre un 4 y un 8% de la deuda. En 2005, los ayuntamientos de Lleida y Zaragoza encomendaron al fisco la gestión de sus deudas por vía ejecutiva.

Por esta vía de apremio la Agencia ha gestionado en 2005 más de 2.100 millones de euros de las deudas de las comunidades autónomas, departamentos ministeriales, confederación hidrográfica y otros entes públicos como la Jefatura de Tráfico. Pero queda por ejecutar la mitad para otros ejercicios, porque no se han encontrado dinero o bienes suficientes para el cobro o porque continúa la tramitación.

Multas de tráfico locales

Aunque no se trata de impuestos, la Agencia Tributaria se encarga del cobro por vía ejecutiva de las multas de tráfico que la Guardia Civil pone en nuestras carreteras. Y lo hace también embargando las devoluciones del IRPF. De los 2,5 millones de multas de cada año, una cuarta parte las gestiona la Agencia. Sólo en el último año la ejecución de las multas ascendió a 436,69 millones de euros, aunque al menos la mitad queda pendiente de un año para otro porque no hay dinero suficiente para pagar la multa de la devolución o porque hay muchos infractores que les sale la declaración positiva y no es posible cobrarles de aquí.

Sin embargo, según comenta Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados, “que Hacienda trabe la devolución no significa que no se pueda recurrir en reposición”. “Se ganan –comenta– más recursos en vía de apremio ante la Agencia Tributaria que ante la Jefatura de Tráfico, porque este departamento abusa de la notificación edictal, un sistema excepcional pero que se aplica habitualmente cuando el infractor no está en su domicilio para recibir la notificación”.

Éste es uno de los asuntos, la falta de rigor de muchos expedientes y la multitud de recursos, que la Agencia Tributaria sopesa ahora en la negociación de un convenio que mantiene con la Federación de Municipios y con algunos ayuntamientos importantes, como el de Barcelona, para hacerse cargo de la recaudación ejecutiva de sus multas de tráfico locales. En esta ciudad, el impago de las multas supera el 60% de las sanciones frente a, por ejemplo, las deudas de los impuestos, que no llegan al 8%. En Madrid, el Ayuntamiento ha llegado a un acuerdo con el Gobierno de la Comunidad para que le gestione las multas en vía de apremio. Pero está a la espera de tener suscrito el convenio con la Agencia Tributara en este mismo año. Lo que significará que también las multas de tráfico de las ciudades se van a cobrar de las devoluciones de la renta.