A CaixaBank y Sabadell, Cataluña se les quedó pequeña
09 / 10 / 2017 José María Vals
Las dos grandes entidades financieras catalanas tienen la mayor parte de su negocio fuera de su comunidad autónoma de origen desde hace bastantes años.
La escalada de tensión generada por el referéndum y el reto soberanista del independentismo catalán han puesto la lupa de inversores y analistas sobre los dos grandes bancos con origen y sede social en Cataluña: CaixaBank y Sabadell. Sus oscilaciones en bolsa y el mensaje de ambas entidades a sus empleados, a los que han prometido que el negocio es lo primero y que harán lo que sea para salvarlo, son buena muestra de cómo la tensión política ha comenzado a penetrar en la economía real.
Tras el anuncio de Carles Puigdemont de que habría una declaración unilateral de independencia, los máximos ejecutivos de CaixaBank y Sabadell dejaron claro que tomarías las medidas necesarias para defender a los depositantes. La independencia efectiva es imposible que se produzca, porque para eso deberían de aceptarla España y la comunidad internacional, pero como decían los antiguos, “el dinero es muy miedoso” y hay que tener un plan B por si acaso, aunque nadie lo haya pedido.
De hecho, por ejemplo, el Banco Central Europeo (BCE) pidió a los bancos con filiales en el Reino Unido que prepararan un plan de contingencia y que explicaran cuál sería el impacto en sus cuentas por la salida británica de la Unión Europea, el denominado brexit. Con el problema catalán, el Banco de España tampoco ha pedido un plan B, pero las directivas de los dos grandes bancos con origen en esa comunidad autónoma parece que los tienen.
