Estrenos de la semana

Coco

Dirección: Lee Unkrich y Adrian Molina

Reparto: Gael García Bernal, Benjamin Bratt y Alanna Ubach

En su fecunda producción cinematográfica, el estudio Pixar ha logrado dar vida antromorfa a todo tipo de objetos inanimados o animales: desde los juguetes de Toy Story hasta los estados de ánimo de Inside Out, pero nunca hasta el momento se había atrevido a animar a los muertos. Y en ese particular no hay una tradición más arraigada que el Día de los Muertos mexicanos, con su celebración del más allá y su sana tradición de airear los esqueletos al menos una vez al año. De esto último habla este filme: de los secretos traumáticos que las familias encierran en lo más profundo de los armarios para no tener que enfrentarse a ellos. En este caso, el drama familiar -porque de eso habla siempre Pixar, aunque no lo parezca- es un abandono que ha marcado toda una familia de generación en generación: condenada a una vida sin música por un tatarabuelo que prefirió perseguir su vocación artística que encargarse de los suyos. Y en estas circunstancias conocemos al pequeño Miguel, aspirante a cantante y guitarrista, que se ha empeñado en agitar los gruesos cimientos de tristeza y resentimiento en los que se sostiene su hogar.

La ocasión sociopolítica en el país de Donald Trump es única: un filme estadounidense que honra las tradiciones del tantas veces denostado vecino del sur. Con Coco Pixar firma una declaración de intenciones en términos políticos mientras aprieta esas tuercas y ajusta esos tornillos que siempre se aflojan en cualquier familia: da igual que sea la de los robots del postapocalipsis climático, la de los personajes de videojuego encerrados en una placa base o la nuestra.  

El sacrificio de un ciervo sagrado

Dirección: Yorgos Lanthimos

Reparto: Colin Farrell, Nicole Kidman y Alicia Silverstone

Las consecuencias de afrentar a una deidad se pagan caras. El rey Agamenón aprendió esta lección cuando tuvo que sacrificar a su hija Ifigenia para calmar la furia de Artemisa. El monarca había matado a un ciervo en una arboleda sagrada y la diosa en respuesta paralizó todas sus embarcaciones que navegaban hacia Troya. En el último filme del cineasta griego Yorgos Lanthimos (Canino, Langosta), titulado El sacrificio de un ciervo sagrado, la referencia a este episodio mitológico es más bien tangencial al arco narrativo, pero proporciona información suficiente como para operar como clave de lectura.

Colin Farrell interpreta a Steven Murphy, un respetado cirujano cardiovascular que estrecha una extraña amistad con el hijo adolescente de un paciente que murió en su quirófano. La irrupción del chaval en su vida paraliza el engranaje familiar de Murphy y revela todas las fallas de su relación con su esposa Anna (Nicole Kidman). Lanthimos afina su voz y su mirada narrativas -planos improbables, música siniestra y diálogos intencionadamente afectados- para operar el corazón herido de una familia unida por la ambición y la falsedad.