35 años de chicas Almodóvar

27 / 10 / 2015 Celia Lorente
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Muchas son las afortunadas que han pasado por su claqueta desde que estrenó su primera película, Pepi, Luci, Bom... Las chicas Almodóvar cumplen años sin renunciar a su peculiar carácter

Las actrices de "Mujeres..." reconocen que no sospechaban el bombazo que iba a suponer la película en sus vidas.

El 27 de octubre de 1980 se estrenaba en las carteleras de los cines españoles el primer largometraje comercial de Pedro Almodóvar, Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón. Una película que no dejaba a nadie indiferente. Los críticos de la época la atacaron tachándola de vulgar y de serie B, mientras otros como el diario El País la elogiaban: “Trastoca con verdadero atrevimiento los más respetados tabúes de nuestra ridícula sociedad”. Pepi, Luci, Bom..., es una cinta técnicamente pobre, aunque vista con el paso de los años se ha convertido en un documento de la movida punk-libertaria posfranquista que se desarrolló en el Madrid de los ochenta. Almodóvar la ideó en un principio bajo el título de Erecciones generales y fue la propia protagonista Carmen Maura la que se encargó de recaudar el dinero necesario para hacerla realidad.

Kiti Manver, una de las actrices que rodó con Almodóvar Pepi, Luci, Bom... recuerda que casi no pudieron acabar la película porque les faltaba dinero. Cuenta a TIEMPO: “Tuvimos que hacerla en dos partes hasta que se consiguió recaudar un millón de pesetas. Yo salía haciendo un anuncio surrealista de champú Sunsilk y tuve que ponerme un postizón porque me había cortado el pelo en la segunda parte del rodaje. Almodóvar era una de esas personas que proponía cosas muy arriesgadas, era muy osado. En ese momento ni sospechábamos la proyección que tendría, lo único que pensábamos es que merecía la pena seguirle la pista a ese señor. No sabíamos que estábamos asistiendo al nacimiento de una personalidad cinematográfica importantísima para todos nosotros y también para el país”. Para la actriz, ser una chica Almodóvar ha sido todo un regalo. “Almodóvar sin duda conoce en profundidad a las mujeres y tiene la magia de saber presentarlas y vestirlas de tal manera que refleja como nadie ese mundo femenino, que es algo muy personal suyo. Él es de los que más se aproxima a su ser porque tiene esa valentía para contar las cosas muy arriesgadamente. Habla de mujeres que tienen muchas dificultades y en ese sentido a mí me emociona especialmente”.

El universo femenino es un clásico en la filmografía de Almodóvar. Mujeres que dan vida a personajes fuertes, que huyen de sus terribles realidades para encontrar la vida que desean tener, buscando la libertad física y emocional. “Las mujeres resisten mejor que los hombres los golpes de la vida; esta capacidad de resistencia siempre me ha inspirado”, confiesa Almodóvar. El director creció en su pueblo de La Mancha, Calzada de Calatrava, rodeado de mujeres, escuchando a su madre, a las vecinas, a sus hermanas en el taller de costura, a sus tías... y en ellas están inspirados muchos de sus personajes. Su madre, Paquita, es el modelo perfecto que se prolonga en varias de sus películas e incluso aparece en algunas de ellas. Carmen Maura, que conoció bien a la señora Paquita, decía: “La madre de Pedro es superespecial. Es una madre graciosísima. Tiene esa cosa de la tierra, de lo auténtico, de lo real. No se calla nada de lo que se le ocurre. Siempre va por lo derecho y con el sentido común por delante”. Aunque Paquita no dudaba en lamentarse de que las películas de su hijo fueran “muy guarras” y la avergonzaban ante sus vecinas.

En una ocasión un periodista extranjero le comentó a Almodóvar: “Usted dice que la mayor parte de los papeles femeninos que ha escrito son una mezcla de su madre y sus vecinas de La Mancha, con la Audrey Hepburn de Desayuno con diamantes, la Giulietta Masina de La strada y la Shirley MacLaine de El apartamento”. Él le contestó: “Cinematográficamente añadiría a la Gena Rowlands de Opening Nights y a Romy Schneider”.

El sueño de todas las actrices españolas y de muchas estrellas extranjeras ha pasado durante años por trabajar a las órdenes de Pedro Almodóvar. El manchego aporta una dosis extra de glamour y de credibilidad al currículo y un toque de haber sido la elegida de los dioses, como reflejaban los versos de Sabina en una de sus canciones. El cineasta manchego ha sabido rodearse en todas sus películas de actrices españolas que han saltado a la fama posteriormente, en parte, gracias a sus filmes. Según Marisa Paredes, fue en la Mostra de Venecia donde surgió el término chica Almodóvar. “Cuando presentamos Entre tinieblas, que era la primera película de Pedro que se veía fuera de España, éramos tantas actrices que siempre faltaba alguna para hacer la foto y los fotógrafos italianos, que son muy graciosos, preguntaban, ¿dónde están le ragazze Almodóvar?”.

De chicas a mujeres. Desde aquellas primeras alocadas chicas de Pepi, Luci, Bom... a la última creación del manchego, Silencio, se podría hacer una tesis doctoral sobre el cambio que en estos 35 años han experimentado las chicas, algunas ya señoras, Almodóvar. Aunque Kiti Manver cree que tampoco han cambiado tanto en estos 35 años. “Siguen siendo unos personajes femeninos no solo alocados sino que ahora son psicológicamente más locos y con más profundidad. Siguen siendo personajes muy bestias. Y lógicamente han evolucionado como el propio cineasta”.

Silencio_©Agustín_Almodóvar-F

La lista de chicas Almodóvar es extensa, y el manchego, un director que ha sabido sacarles tanto partido a sus actrices de reparto como a las propias protagonistas. Un coro de secundarias esenciales aparecen en todas sus historias. Chus Lampreave, Rossy de Palma, María Barranco, Bibiana Fernández, Loles León, Verónica Forqué... han protagonizado algunos de los mejores momentos, e incluso han salvado el ritmo de alguna de sus películas con sus intervenciones. Las escenas más aplaudidas de la filmografía almodovariana están protagonizadas por ellas. Como la entrañable portera testiga de Jehová Chus Lampreave en Mujeres al borde de un ataque de nervios: “Lo siento señorito, pero yo soy testiga de Jehová y mi religión me prohíbe mentir. Yo solo puedo decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. ¡Ya me gustaría a mí mentir, pero eso es lo malo de las testigas, que no podemos!”, o en La flor de mi secreto dirigiéndose a Marisa Paredes: “¡Qué pena hija mía tan joven y ya estás como vaca sin cencerro!”. Almodóvar adora a Chus Lampreave, que le recuerda a su madre, y se refiere a ella como una Buster Keaton en femenino.  O la desternillante María Barranco enamorada de un terrorista chiíta en Mujeres...: “Yo notaba algo raro, me confiesan que son terroristas chiítas. (...) Pepa, no sabía dónde presentarme. Yo no podía ir a Málaga con esta papeleta... Bastante es que soy modelo”. O la escena de Rossy de Palma gritando a Chus Lampreave en la cocina, madre e hija en La flor de mi secreto: “¿Dónde lo has puesto, que lo guardas todo como una urraca?”.

Sus musas. Chicas Almodóvar ha habido muchas, y aunque al manchego le haya pesado en algún momento, Carmen Maura es y será su mejor pareja de baile. Ninguna como ella ha sabido reflejar el espíritu de lo que es ser una chica Almodóvar porque ella es la chica Almodóvar por excelencia. Fuerte y débil a la vez, capaz de cualquier cosa y a la que mejor le quedan los trajes de chaqueta rojos (con permiso de Marisa Paredes). Ha trabajado en ocho de sus películas y permanece imborrable en la memoria con su personaje en ¿Qué he hecho yo para merecer esto?, donde representa el calvario de Gloria, un ama de casa que sobrevive al infierno urbano en un bloque de pisos de la M-30 o interpretando a la Pepa de Mujeres al borde de un ataque de nervios, que llevó a Almodóvar a ganar el Goya a la mejor película y hasta las mismísimas puertas del Oscar. Aunque fue precisamente en este rodaje donde comenzó el mal rollo entre los dos. “El único momento en el que lo he pasado mal en mi carrera fue en el rodaje de Mujeres al borde de un ataque de nervios”, dijo la Maura. Tras años de desencuentros la actriz y el director parecían haber sellado la paz en 2006 al reencontrarse para rodar Volver, donde Almodóvar la recupera dando vida a Irene, una mujer que regresa como un fantasma para aliviar el dolor del pasado. La película sirvió para reunirles de nuevo, fue un éxito para ambos y reportó un Goya a cada uno, pero resultó solo una tregua momentánea tras la cual no han vuelto a rodar juntos.

LOS-ABRAZOS-ROTOS-26©_EL_DESEO_D.A._S.L.U-_Foto_PAOLA_ARDIZZONI_y_EMILIO_PEREDA_F

La Maura puede renegar del título pero es la actriz que mejor ha representado el espíritu de Almodóvar. Penélope Cruz tomó el relevo como su musa en su etapa introspectiva. Su trabajo con Almodóvar comenzó en 1997 con Carne trémula, luego vendrían Todo sobre mi madre, Volver, Los abrazos rotos y su más reciente intervención en un pequeño cameo en Los amantes pasajeros. Otra actriz importante para Almodóvar fue Victoria Abril, que según la experta y crítica de cine Nuria Vidal podía haber hecho muchas más películas con él pero no fue posible. “Antes de Átame, porque Victoria no quiso, le pareció poco el papel de Cristal en Qué he hecho yo..., y al final se convirtió en chica Almodóvar en tres títulos Átame, Tacones lejanos y Kika. No hubo más. La verdad es que si la unión entre Carmen y Pedro era completamente natural, la unión entre Victoria y Pedro estaba condenada al fracaso. Victoria era una actriz muy dominante, muy impositiva, a la que solo Vicente Aranda conseguía dominar”, explica Vidal.

Pero hay otras actrices como Cecilia Roth o Marisa Paredes que también han tenido mucho recorrido y han jugado un importante papel en el cine de Almodóvar. “El caso de Marisa Paredes es interesante, es la actriz perfecta para Pedro cuando necesita reflejar grandes damas, elegantes pero tiernas, dominantes y con una necesidad de afecto”. Es difícil olvidar su magnífica escena en Los abrazos rotos en la que pregunta a su marido (Imanol Arias): “¿Existe alguna posibilidad, por pequeña que sea, de salvar lo nuestro?”. 

La última chica Almodóvar. Desde el estreno de Pepi, Luci, Bom... ya ha llovido y han sido muchas las actrices que desde esa primera película han pasado por la claqueta del director manchego, la última, Adriana Ugarte, que rueda en estos momentos la que hace la película número 20 de la filmografía de Almodóvar, Silencio. Imposible que nos cuente su experiencia. Si algo lleva la productora de Almodóvar, El Deseo, a rajatabla es que fuera del periodo de promoción comercial no hay otra cosa que silencio. “No sabes el número de peticiones que tenemos y algunas muy gordas de medios extranjeros... pero no podemos hablar”, nos dan calabazas desde El Deseo. Así que nos remitimos al único comunicado que han difundido hasta ahora, que afirma que Silencio “trata del destino inevitable, del complejo de culpa y de ese misterio insondable que nos hace abandonar a las personas que amamos, borrándolas de nuestra vida como si nunca hubieran significado nada”.

La nueva película de Pedro Almodóvar cuenta la historia de Julieta interpretada por dos actrices, Emma Suárez, rostro veterano del cine, la televisión y el teatro, y Adriana Ugarte, que interpretan las diferentes etapas de la vida del personaje. La protagonista Julieta está rodeada de un “coro de secundarias esenciales que aparecen en la historia”. Nuevas chicas Almodóvar que debutan frente a la cámara del director como Inma Cuesta, que califica el proyecto como “un sueño cumplido”, Nathalie Poza, Pilar Castro y Michelle Jenner. Así que el elenco de chicas Almodóvar sigue creciendo y aumentando su plantilla.

UNAS PARTICULARES CHICAS DEL MONTÓN

¿Eran las chicas del montón en los ochenta como las describe Pedro Almodóvar en Pepi, Luci, Bom...? En el libro Conversaciones con Pedro Almodóvar, su autor, Fréderic Strauss, las define como “unos personajes excéntricos que no albergan ninguna duda sobre el hecho de que el mundo se parece a lo que ellos son. Y para Pedro Almodóvar la vida madrileña se parece, sin lugar a dudas, a una película”, explica.

La historia se desenvuelve alrededor de tres mujeres: Pepi (Carmen Maura), una joven progre y mantenida por sus padres; Luci (Eva Silva), una pervertida ama de casa casada con un policía; y Bom (Alaska), una rockera escandalosa de una banda underground. La violación de Pepi es el conflicto que modifica el destino de todos los personajes que desarrollan la trama en el Madrid de la Movida. Almodóvar describió la película como una historia sobre “seres humanos fuertes y vulnerables que se abandonan a la pasión, que sufren el amor y se divierten”. Y reconoce que está llena de defectos: “Cuando una película solo tiene uno o dos se considera una película imperfecta, mientras que cuando los defectos alcanzan tal profusión constituyen un estilo”.

La cantante Alaska fue la encargada de dar vida a Bom. De hecho, los interiores de la película fueron rodados en su casa. “No tuvo gran acogida , la verdad” recordaba Alaska, que interpretó el personaje con tan solo 15 años. “Fue un estreno poco lucido en San Sebastián y una gira de grandes altibajos. En Murcia tan solo duró un día en cartel”. Su actuación fue una de las más criticadas que ella disculpó diciendo: “Soy cantante y no actriz”. Y para la escena más controvertida de la película, en la que orinaba encima de Luci, se utilizó cerveza y una pequeña manguera. El rodaje duró dos años y se hizo sobre la marcha, no contaban con presupuesto ni con permisos para rodar en la vía pública, con lo que se rodaron un número mínimo de exteriores para no ser multados. Almodóvar cuenta que “la moraleja de la película es que las chicas modernas se quedan solas. Pepi y Bom abandonan a Luci, que no se queda sola, mientras que ellas lo están terriblemente. Libres pero solas. Ese carácter incierto y errático de los personajes femeninos me interesa mucho”, confiesa Almodóvar.

MARÍA BARRANCO
MARÍA-BARRANCO-F

Mejor interpretación femenina de reparto por Mujeres...

¿Han cambiado mucho las chicas Almodóvar en 35 años?

Sí, en que tenemos más años [bromea], estamos más maduras y con más achaques, es lo que tiene la edad...

¿Las mujeres que refleja Almodóvar se parecen a las de la realidad?

Yo creo que sí, no hay mayor realidad que el que te llegue el desamor. Todas hemos hecho el ridículo y nos hemos puesto en evidencia por amor. La que más y la que menos se ha enrollado con un “terrorista” que la ha dejado hecha polvo y la ha bombardeado, eso es una verdad como un templo.

¿Qué recuerda del rodaje de Mujeres...?

Estaba asustada, pero recuerdo que Pedro estuvo conmigo muy cariñoso y me ayudó muchísimo, él me decía que tenía que perder el respeto. Yo no tenía ni idea de que aquello podía alcanzar aquel éxito.

¿Sigue guardando los famosos pendientes de cafeteras?

No solo los guardo sino que los tengo en una vitrina que me regaló un amigo y que es como un altarcito y cuando viene la gente a mi casa se hace fotos con ellos.

¿Almodóvar es tan exigente como dicen? Algunas como Carmen Maura han salido tarifando...

Conmigo no, conmigo era muy protector. Me ayudó mucho y es una de las mejores cosas que me han pasado en la vida. Para mí la ilusión más grande sería volver a trabajar con él.

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